"Tenemos estadios que están ya en proceso de construcción y estos deben estar listos hasta diciembre de 2013 para estar en una situación extremadamente tranquila y confortable. Hay otros que están un poco más demorados, pero todos, hasta ahora, estarán listos" para el Mundial-2014, afirmó en entrevista radial.
"Tengo la seguridad de que Brasil va a estar preparado en 2014 para ofrecer la mejor Copa del Mundo. Nosotros (el gobierno) junto a los gobernadores y alcaldes de las ciudades de la Copa estamos tomando todas las providencias para que eso ocurra", dijo la mandataria según AFP.
La Copa Confederaciones se celebra en junio de 2013 y exigirá buena parte de la infraestructura proyectada para 2014.
La Federación Internacional de Fútbol (FIFA) reiteró su preocupación por la organización del Mundial en Brasil, pero a finales de junio dio un voto de confianza a los organizadores del evento que inicia el 12 de junio de 2014.
El estadio de Sao Paulo, que aspira a recibir el partido inaugural de la Copa del Mundo, recién comenzó a edificarse, mientras que la construcción del de Natal (noreste) no se inició.
Pero además de la infraestructura deportiva, Brasil necesitará más de 11.400 millones de dólares para mejorar sus carreteras, la oferta hotelera, reforzar la seguridad, la red de telecomunicaciones y ampliar sus desbordados aeropuertos, según un reciente estudio de la Fundación Getulio Vargas y la consultora Ernst & Young Terco.
"Estamos cumpliendo estrictamente el cronograma para ampliar aquellos aeropuertos que son los más congestionados del país", señaló Rousseff, cuyo gobierno dejará a privados la administración del aeropuerto internacional de Guarulhos y el de Viracopos (Sao Paulo), así como el de Brasilia.
Además de la Copa del Mundo de 2014, Rio de Janeiro recibirá los Juegos Olímpicos en 2016.
