El astro portugués olvidó así sus gestos de frustración e impotencia en sus últimos enfrentamientos con el Barça, donde la otra gran estrella del fútbol, el argentino Leo Messi, había ganado la partida.
Pero esta vez todo cambió en el minuto 103 de partido, cuando su remate de cabeza sirvió para batir a José Manuel Pinto y dar a su equipo la ansiada Copa del Rey, un objetivo que se le resistía al club desde hace casi dos décadas.
La liberación llegó por fin para el Balón de Oro de 2008, que sabía que su equipo había conseguido un triunfo deportivo, pero también anímico, ante su gran adversario histórico.
"Es una gran alegría, no sólo por haber marcado el gol, sino por haber ganado la Copa. Estamos muy felices, es un título muy importante y ahora vamos a disfrutar", dijo Cristiano tras el encuentro.
"Este triunfo ha metido una energía positiva en el equipo. Ha sido un partido muy difícil y quien marca gana", añadió el luso con la satisfacción de haber dado al equipo un título que se le escapaba desde 1993.
El jugador más caro de la historia, comprado por 93 millones de euros en 2009, había logrado su último gran título en 2009, con la Premier League para el Manchester United, por lo que mantenía sin inaugurar su palmarés con el equipo de la capital española.
Como si fuera una premonición de lo que iba a ocurrir después en el Real Madrid, Cristiano se despidió del Manchester con una derrota por 2-0 frente al Barça en la final de la Liga de Campeones en Roma.
La pasada temporada, el Real Madrid se quedó en blanco, por detrás de un Barcelona que se proclamó campeón de la Liga, y esta temporada las cosas parecen también decididas en el torneo nacional, donde los azulgranas cuentan con ocho puntos de ventaja en la clasificación.
En sus duelos ligueros particulares, el Barça goleó 5-0 en la primera vuelta en el Camp Nou y el sábado empató 1-1 en el Santiago Bernabéu, dando un gran paso hacia el título.
Pero el miércoles, como escribió el diario Marca este jueves, Cristiano Ronaldo, de 26 años, "cambió la historia".
El nuevo número 7 del Real, desde la marcha de Raúl al Schalke 04, ha logrado por fin destacar en un Barça-Madrid o en un duelo Messi-Cristiano.
El argentino del Barcelona prácticamente no apareció en la final de Copa en Valencia. Frente a él, Cristiano fue preferido en el once titular en el ataque, relegando al banquillo a puntas natos como el francés Karim Benzema, el togolés Emanuel Adebayor o el argentino Gonzalo Higuaín.
Su tanto en la final le permitió además igualar a siete tantos con Messi como máximo anotador de la actual Copa del Rey.
El duelo de las dos grandes estrellas está lejos de estar terminado.
En la tabla de máximos anotadores de la Liga están igualados a 30 tantos en lo más alto y en la Liga de Campeones el Barcelona y el Real Madrid se verán las caras a ida y vuelta (27 de abril, 3 de mayo) en las semifinales.
Messi es el actual máximo anotador de la 'Champions', con nueve dianas, pero Cristiano sueña con superarle, aunque está tres tantos por detrás. El 'efecto Copa del Rey' podría suponer una gran ayuda en ese objetivo
