Un punto más y matemáticamente la liga será azulgrana. La victoria del Barcelona ante el Espanyol (2-0) deja al equipo de Josep Guardiola a un empate de conquistar su vigésimo primer título liguero de la historia.
En un plácido partido de los barcelonistas, conducidos por la clarividencia de Andrés Iniesta, que ofreció una clase magistral de fútbol, los azulgranas no tuvieron que emplearse en exceso para conseguir su objetivo.
Un gol de Iniesta, en el primer tiempo, y otro de Gerard Piqué, en el inicio del segundo, le dieron la victoria al Barcelona, un equipo que jugó con el freno de mano puesto durante muchos minutos del segundo tiempo ante un rival en el que sólo Osvaldo dio muestras de calidad.
En un plácido partido de los barcelonistas, conducidos por la clarividencia de Andrés Iniesta, que ofreció una clase magistral de fútbol, los azulgranas no tuvieron que emplearse en exceso para conseguir su objetivo.
Un gol de Iniesta, en el primer tiempo, y otro de Gerard Piqué, en el inicio del segundo, le dieron la victoria al Barcelona, un equipo que jugó con el freno de mano puesto durante muchos minutos del segundo tiempo ante un rival en el que sólo Osvaldo dio muestras de calidad.
El Barça había conseguido su objetivo y tiene la Liga a tiro, a un punto, un empate que buscará el próximo miércoles en Valencia, en el campo del Levante.