Palermo le ganó 2-1 al Milan, que el fin de semana ganó el Scudetto, y accedió a la final de la Copa Italia. Pastore, que hizo un gol en la ida, fue titular y salió reemplazado por Muñoz.
La ida había sido un 2-2 poco propicio para el Milan, que hacía de local ante un Palermo que se le animó. Por eso, si el actual campeón del Calcio quería estar en la final de la Copa Italia, debía salir a ganar en el estadio Renzo Barbera. No pudo ser, el equipo que contó con Javier Pastore entre sus titulares, terminó eliminándolo.
La historia estaba 0-0 hasta que Giulio Migliaccio puso el primero allá por los 63'. El equipo rosa no dio tregua y siguió yendo pese a que con ese resultado ya le alcanzaba. Así, llegó un penal y Cesare Bovo lo cambió por gol para estirar la ventaja.
Milan, herido en su orgullo, fue a buscar el milagro y Zlatan Ibrahimovic llegó a poner el descuento a los 94'. Era demasiado tarde, el Palermo (Ezequiel Muñoz ingresó a los 76' por Pastore) le había dado una lección. La otra llave la protagonizan Inter y Roma. En la ida, en el Olímpico, fue 1-0 para los de Leonardo. Ahora, se verán las caras en el Giuseppe Meazza.
