La tenista danesa Caroline Wozniacki, número uno del mundo, reveló una vez más el sábado su lado excéntrico en Wimbledon al robar el protagonismo de Novak Djokovic en la conferencia de prensa previa al Abierto Británico.
Luego de haber esquivado las lluvias londinenses para entrenar un poco en las canchas de césped del All England Club, la rubia jugadora se sentó en el salón de prensa principal y parodió una entrevista con el serbio.
Djokovic, número dos del mundo y apodado el "bromista" por su sentido del humor y sus imitaciones cómicas de colegas, hizo a un lado las preguntas sobre su condición física y sus expectativas en Wimbledon para sumarse a las bromas de su vecina de Montecarlo.
"Tuviste esta racha adversa de un partido, ¿cómo vas a hacer para cambiar eso?", preguntó a Djokovic la danesa de 20 años, presentándose como periodista de un periódico de Mónaco y haciendo referencia a la derrota del serbio en las semifinales del Abierto de Francia que le cortó una serie de 43 triunfos consecutivos.
"Bueno, trataré de observar algunas jugadoras que han sido muy regulares con sus triunfos, por ejemplo como Caroline Wozniacki. No sé si escuchaste sobre ella", respondió Djokovic.
Entre risas, Wozniacki preguntó a Djokovic quién era su tenista mujer favorita.
"Bueno, tendré que mantener eso en secreto", contestó el serbio. "Creo que ya descubrí a una de mis favoritas. Acabo de decir su nombre. De hecho, también es vecina mía (...) vive en tu calle", continuó.
El extraño intercambio finalmente terminó cuando una autoridad de la WTA dijo a Wozniacki unas palabras al oído.
"No puedo hablar más. Me están presionando", manifestó la danesa antes de que los medios internacionales continuaran con la conferencia de prensa formal.
No es la primera vez que Wozniacki sorprende a los medios.
En el Abierto de Australia de este año, la número uno animó la conferencia con una historia acerca de que había sido atacada por un canguro bebé, para luego confesó que la había inventado.
La fábula del canguro siguió a otra conferencia en la cual se burló de las preguntas repetitivas que suele recibir sobre el tenis femenino, realizando un monólogo en el cual se preguntaba a sí misma.