Sin una idea clara de juego y con un revolcón total en la nómina y en el esquema, el Verdolaga perdió en el debut.
Con menos de dos opciones de gol en todo el encuentro, Atlético Nacional inició de manera oficial la era Lillo, que pareció darle la razón a la inconformidad de la hinchada con los cambios que ha sufrido el club en las últimas semanas y que parecen no surtir efectos positivos respecto a lo futbolístico.
Santa Fe se vio ordenado y se apegó a la idea de juego que planteó el nuevo cuerpo técnico, esperar a Nacional y atacar en bloque esperando el error de la inédita defensa verdolaga. Algo que dio fruto sobre el minuto 50 del encuentro cuando Pajoy sentenció el marcador con su gol.
La desconexión entre líneas se hizo evidente y los cambios fueron poco efectivos para el estratega español, que tiene bastante trabajo por delante según lo demostrado hoy, pues el actual campeón colombiano palideció en su cancha y dejó una imagen escuálida que no es ni la sombra de lo que fue el equipo en tiempos pasados.