Si eres de los que piensa que el golf es un deporte demasiado aburrido, entonces deberías ir a Australia, en concreto al Carbrook Golf Club en Queensland. En este campo la trampa de agua tiene tiburones reales. No es broma. Aquí está la prueba.
Los tiburones fueron un mito durante años, pero como se puede ver en el video son reales, los hay hasta de diez pies de largo y por lo que parece llegaron al campo tras una inundación en los años 90.
Los tiburones son alimentados con gallinas, lo cual es bueno porque al menos no desarrollan un apetito por la carne de jugador.
Así que queda demostrado que en un campo de golf pueden pasar cosas peores que las que sucedieron a Rory McIlroy el pasado fin de semana.