Sergio Pérez no pudo participar en la anterior cita del Mundial, en Canadá, debido a unos mareos que sintió en la jornada del viernes de aquel gran premio como consecuencia del accidente que tuvo hace casi un mes en el Gran Premio de Mónaco y que le tuvo tres días en el hospital.
"Al principio de la primera sesión todavía sentía mareos, pero conforme avanzaba ha mejorado y al final me he encontrado bien. Mañana espero estar ya al cien por cien. Creo que es una situación normal, ya que el cuerpo se va acostumbrando poco a poco y en la segunda sesión estuve mucho mejor", ha comentado el mexicano.
Se ha mostrado contento por haber podido regresar a la pista tras "dos emanas de mucho trabajo para recuperar un buen nivel físico". "Creo que lo hemos logrado", ha comentado Pérez, quien ha agradecido el apoyo de su equipo en su vuelta a la competición.
El piloto de Guadalajara prevé dificultades en la sesión de calificación de mañana, sábado, aunque cree que se puede suavizar la situación el domingo en la carrera.
"Es un circuito muy difícil para nosotros por las largas rectas que hay y no pinta bien, pero mañana lo intentaremos en la calificación y hacerla buena para poder entrar en los puntos el domingo, ya que nuestro ritmo de carrera es mejor que una vuelta de calificación", ha comentado.
Otra aspecto destacado por 'Checo' Pérez ha sido la "gran diferencia" entre el rendimiento de los neumáticos blandos y los medios elegidos por Pirelli para la carrera de Valencia.
"Preferiría tener el súper blando y el blando, ya que el medio que eligieron tarda mucho en calentarse. Además, la pista no es muy abrasiva, lo que hace más difícil todavía, pero la temperatura va a subir para mañana y creo que será mejor su rendimiento", ha explicado.
Pérez ha agradecido el apoyo recibido desde México para que volviese a la competición tras su ausencia en Canadá. "Contar con el apoyo de todo mi país es algo que me llena mucho y es muy importante a la hora de afrontar la salida a la pista", ha subrayado.
