El finlandés Jari-Matti Latvala (Ford) consiguió el triunfo en el Rally de Gales, décima prueba del Mundial, por delante del francés Sebastien Loeb (Citroen), que batió en la pugna por el segundo puesto al noruego Petter Solberg (Ford), al que deja sin opciones de ganar el título de pilotos, que será para un piloto de Citroen.
Solberg ya se queda sin opciones matemáticas en la lucha por el campeonato, por lo que ya sólo Loeb o el finlandés Mikko Hirvonen, su compañero en el equipo oficial Citroen, pueden optar al título.
Aunque en realidad el francés ya puede comenzar a saborear su corona puesto que el escandinavo es su escudero, hay mucha diferencia entre ambos, y desde el equipo no le dejarán inquietar a Loeb en la consecución de su noveno título de pilotos.
Latvala cumplió con la victoria el dominio demostrado desde el primer día por parte de los hombres de Ford. Actuaban de locales -la sede del equipo está en tierras británicas-, y necesitaban este triunfo tras el dominio de Citroen y Loeb durante todo el año.
Hoy sólo tuvo que mantenerse en pista y llegar a meta, puesto que contaba con un buen colchón de segundos sobre sus perseguidores. Aunque tampoco debía confiarse, son habituales sus salidas de pista y sus averías mecánicas y por detrás se estaba produciendo una lucha por el segundo puesto, con lo que podrían alcanzarlo.
Por su parte, a Loeb, en sus intenciones de eliminar a Solberg en la lucha por el Mundial, le valía el tercer puesto en el que comenzaba la etapa, pero al francés no le gustan las especulaciones y quería ganar sobre la pista.
Salió a por todas, con el mejor ritmo desde el inicio de la competición, y tras el segundo tramo del día ya lo había superado. El noruego se la devolvería en la penúltima especial y se colocaba segundo por lo que todo se decidiría en el último tramo, que otorga una bonificación de puntos a los mejores tiempos.
Aquí llegaron separados por sólo una décima a favor de Solberg, pero en el 'Power Stage' Loeb fue más rápido, con lo que terminó por delante.
Por detrás, el noruego Mads Otsberg (Ford) compitió más relajado que los días anteriores, con Hirvonen detrás a más de medio minuto. Sólo tuvo que cumplir con los kilómetros para aventajar al segundo del Mundial. Demostró que es el mejor de los privados y que tiene nivel para tener un coche oficial.
Hirvonen, tras un fin de semana en el que no estuvo nunca del todo contento con el coche ni con su ritmo, al menos tuvo el honor de marcar el mejor tiempo en el último tramo, por lo que los tres puntos fueron para él.
Destaca también el décimo puesto del catarí Nasser Al-Attiyah (Citroen), quien el año próximo espera estar en la estructura oficial de la marca y que además volvía a tierras británicas, donde este verano consiguió una medalla en tiro en los Juegos Olímpicos.
Con esta victoria, Latvala suma ocho triunfos en su palmarés del mundial.
La próxima cita del mundial será en Francia entre el 4 y el 7 de octubre, sobre asfalto. Será el lugar perfecto para que Loeb celebre su nuevo título puesto que se disputa en Alsacia, la región en la que nació.
Solberg ya se queda sin opciones matemáticas en la lucha por el campeonato, por lo que ya sólo Loeb o el finlandés Mikko Hirvonen, su compañero en el equipo oficial Citroen, pueden optar al título.
Aunque en realidad el francés ya puede comenzar a saborear su corona puesto que el escandinavo es su escudero, hay mucha diferencia entre ambos, y desde el equipo no le dejarán inquietar a Loeb en la consecución de su noveno título de pilotos.
Latvala cumplió con la victoria el dominio demostrado desde el primer día por parte de los hombres de Ford. Actuaban de locales -la sede del equipo está en tierras británicas-, y necesitaban este triunfo tras el dominio de Citroen y Loeb durante todo el año.
Hoy sólo tuvo que mantenerse en pista y llegar a meta, puesto que contaba con un buen colchón de segundos sobre sus perseguidores. Aunque tampoco debía confiarse, son habituales sus salidas de pista y sus averías mecánicas y por detrás se estaba produciendo una lucha por el segundo puesto, con lo que podrían alcanzarlo.
Por su parte, a Loeb, en sus intenciones de eliminar a Solberg en la lucha por el Mundial, le valía el tercer puesto en el que comenzaba la etapa, pero al francés no le gustan las especulaciones y quería ganar sobre la pista.
Salió a por todas, con el mejor ritmo desde el inicio de la competición, y tras el segundo tramo del día ya lo había superado. El noruego se la devolvería en la penúltima especial y se colocaba segundo por lo que todo se decidiría en el último tramo, que otorga una bonificación de puntos a los mejores tiempos.
Aquí llegaron separados por sólo una décima a favor de Solberg, pero en el 'Power Stage' Loeb fue más rápido, con lo que terminó por delante.
Por detrás, el noruego Mads Otsberg (Ford) compitió más relajado que los días anteriores, con Hirvonen detrás a más de medio minuto. Sólo tuvo que cumplir con los kilómetros para aventajar al segundo del Mundial. Demostró que es el mejor de los privados y que tiene nivel para tener un coche oficial.
Hirvonen, tras un fin de semana en el que no estuvo nunca del todo contento con el coche ni con su ritmo, al menos tuvo el honor de marcar el mejor tiempo en el último tramo, por lo que los tres puntos fueron para él.
Destaca también el décimo puesto del catarí Nasser Al-Attiyah (Citroen), quien el año próximo espera estar en la estructura oficial de la marca y que además volvía a tierras británicas, donde este verano consiguió una medalla en tiro en los Juegos Olímpicos.
Con esta victoria, Latvala suma ocho triunfos en su palmarés del mundial.
La próxima cita del mundial será en Francia entre el 4 y el 7 de octubre, sobre asfalto. Será el lugar perfecto para que Loeb celebre su nuevo título puesto que se disputa en Alsacia, la región en la que nació.