La Agencia Mundial Antidopaje (AMA) se mostró hoy "consternada" por la decisión de la Unión Ciclista Internacional (UCI) de disolver la Comisión Independiente creada para examinar las acusaciones que aparecen contra ella en el informe de la Agencia Estadounidense (USADA) sobre Lance Armstrong.
"La Comisión Independiente establecida por la UCI iba a intentar revisar las acusaciones de complicidad en el caso de la conspiración de dopaje de Lance Armstrong, según la decisión razonada de la USADA. En su lugar la UCI ha elegido otra vez ignorar su responsabilidad", afirmó el presidente de la AMA, John Fahey, en un comunicado.
Según el mismo, la UCI ha decidido disolver su propia comisión en base a la renuncia de otros a participar y no por razones que la impidieran actuar de forma transparente y sin miedo.
Fahey recordó que "la AMA no tomó parte en la decisión de establecer tal comisión, incluso ni siquiera fue consultada", y cuando le plantearon participar señaló una serie de temas que fueron rechazados por la UCI sin discusión.
Entre estos temas, la AMA planteó que el caso Armstrong estaba resuelto y no podía ser litigado de nuevo, que el proceso para escuchar a los testigos y obtener evidencias debía hacerse de forma que éstos no temieran represalias y que los hallazgos de la comisión se hicieran públicos de forma inmediata, sin escrutinio previo de la propia UCI.
La AMA aclaró también que "nunca cuestionó la integridad e independencia de los miembros de la comisión, sino únicamente la capacidad de ésta para funcionar correctamente según el contrato dado por la UCI a la Comisión".