El próximo presidente del COI mantendrá por voluntad propia la costumbre de no percibir un salario, pero este punto puede ser reconsiderado en el futuro, afirmó el actual dirigente del organismo, el belga Jacques Rogge, que abandona el cargo el 10 de septiembre.
"Puede haber circunstancias en las que el presidente del COI necesite un salario para ocuparse de sí mismo y de su familia. No tener una remuneración puede refrenar, además, a potenciales candidatos a presidente", explicó Rogge en una conferencia de prensa tras la reunión que la Ejecutiva del organismo ha mantenido en San Petersburgo.
"He consultado a los seis actuales candidatos y todos me han dicho que no quieren ser remunerados. Eso zanja el tema para esta elección, pero en caso de que la situación sea distinta en el futuro, la Comisión Ejecutiva debería tomar una decisión", afirmó el presidente.
Rogge indicó que no espera que aparezcan más candidatos que los ya anunciados e informó de que los seis "podrán presentar un manifiesto a los miembros del COI en la sesión extraordinaria de julio en Lausana".
El alemán Thomas Bach, el puertorriqueño Richard Carrión, el suizo Denis Oswald, el taiwanés Ching Kuo-wu, el singapurés Ser Miang Ng y el ucraniano Sergey Bubka son los aspirantes a suceder al cirujano belga al frente del deporte mundial. La elección se llevará a cabo en Buenos Aires.
Rogge aconsejó a los candidatos "que se mantengan fieles a sí mismos, como son", porque "todos tienen grandes aptitudes, con diferentes personalidades".
Sobre sí mismo, dijo que ya ve "la línea de meta y una cinta en la que pone '10 de septiembre de 2013'".
"Espero cruzarla en buena forma, habiendo dejado a mi sucesor un COI fuerte y habiendo cumplido con mi deber", comentó.
El relevo en la presidencia del COI y la posible renovación del programa olímpico, también en septiembre en la Sesión de Buenos Aires, fueron los dos asuntos que centraron casi en exclusividad la conferencia de prensa de Rogge en el centro de convenciones Lenexpo de San Petersburgo.
Sobre la marcha atrás que ha dado la Ejecutiva con la lucha, propuesta en enero para salir de los Juegos Olímpicos a partir de 2020 y recuperada ahora como deporte candidato, junto al squash y el tándem béisbol-sóftbol, el presidente del COI no aprecia ningún "error" en el sistema de renovación de los deportes.
"La lucha ha tenido una buena reacción a las críticas: ha cambiado el sistema de competición, ha incluido a deportistas y a mujeres en sus puestos directivos... Si hubiéramos eliminado el pentatlón moderno nos habrían acusado de traicionar a Pierre de Coubertin; si hubiera sido el taekwondo, de traicionar el espíritu del deporte asiático. Sabíamos que habría críticas. Estábamos preparados", indicó Rogge.
Si finalmente la Sesión decide que la lucha continúe en el programa, no debe verse como un fracaso de los planes renovadores, dijo el presidente.
"El propósito es tener el mejor programa posible. Si uno de los aspirantes es mejor que los demás, debe ser el elegido aunque no sea nuevo. El punto no es que el programa sea nuevo, sino que sea el mejor", apuntó.
Rogge recomendó a los tres deportes candidatos que hagan en Buenos Aires ante la asamblea de septiembre "una presentación en la que expliquen qué les hace especiales, porque si hablan el idioma del deporte, convencerán a los votantes".
Sobre otros asuntos, no se mostró muy entusiasmado con la idea del austríaco Marius Vizer, elegido hoy presidente de la agrupación de federaciones 'Sportaccord', de crear unos Juegos Mundiales para todos los deportes, olímpicos o no, también cada cuatro años.
"Hay un nuevo líder en 'Sportaccord' y habrá un nuevo presidente del COI dentro de tres meses. Espero que se reúnan y colaboren. Pero mi opinión, que solo es válida para estos tres meses, es que la propuesta contradice la opinión de la ASOIF (federaciones olímpicas de verano), que acaban de declarar que el calendario deportivo está congestionado", expresó.
En ese mismo sentido, se refirió a los nuevos Juegos Europeos que arrancarán en Bakú en 2015 y precisó que el caso es distinto porque no tienen "un programa completo de deportes".
"Veamos cómo evolucionan. Les deseo lo mejor", dijo Rogge, que ya exploró la idea cuando presidió en los noventa los comités olímpicos europeos.
El presidente dijo que la propuesta para nuevo presidente de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA), que por turno rotatorio debe elegir ahora el Movimiento Olímpico, se estudiará en la Comisión Ejecutiva que el COI celebrará en Moscú en agosto, coincidiendo con los Mundiales de Atletismo, o en la de Buenos Aires en septiembre.
La AMA debe saber el nombre en octubre, dijo Rogge, antes de la Conferencia Mundial de noviembre den San Petersburgo.
