El corredor venezolano Igor Elorza no pudo cumplir con la meta de terminar el Ultramaratón de Praga, disputado a lo largo del pasado fin de semana en la República Checa.
El caraqueño extendió al máximo su presencia en la ciudad europea como único representante americano en la justa, pero las condiciones de organización más el clima imperante atentaron contra su intento de cumplir con la distancia,
Elorza, aún en suelo europeo, confirmó que “me retiré en el kilómetro 105 luego de mucho sufrimiento. La prueba no fue pensada para corredores extranjeros y la organización falló en eso”.
El venezolano dijo que dos de los factores que más atentaron contra su buen desempeño fue lo referido a la logística. Ni los mapas ni la señalización de la ruta estaban en inglés como se hace para eventos de tipo internacional y nivel mundial.
“Un ultra de cierre europeo terminó siendo una carrera de aventura, de orientación y curso de aprender checo”, agregó el criollo quien también se desempeña como parapentista.
Las 100 millas de Praga o Ultramaratón de Praga se corrió en distancia de 145 kilómetros, contemplados en dos etapas de 80 y 65 con salida el día viernes y llegada como máximo el domingo. Fue una prueba de tipo non stop.
Elorza cumplió los primeros 9 kilómetros en tiempo final de 45 minutos y 2 segundos para acomodarse en la quinta posición parcial de la carrera.
En el segundo puesto de control del evento, a los 25 kilómetros. Estaba en la casilla octava con crono de dos horas, 32 minutos y 57 segundos.
Elorza explicó que una de las razones para el retiro tuvo que ver con la orientación en la ruta. “Por cada salida de un bosque para entrar a un pueblo perdía mucho tiempo esperando que alguien me alcanzara para seguir en el trazado”.
“No sabías si parar, correr porque no sabías lo que te venía y eso impedía administrar las energías”, analizó,
A pesar de ello, al término de los 62 kilómetros llegó a estar en la casilla 26 con acumulado de 8 horas, 26 minutos y 21 segundos,.
Y al final de la primera etapa, en el corte de los 80k, Elorza logró meterse en el puesto 33 con 11:45.58.
El ritmo que llevaba el criollo le iba a poder permitir cerrar el evento en menos de 40 horas como lo hizo en carreras de similar distancia en otras partes del mundo.
Al momento del retiro de Elorza, ya iniciada la segunda etapa de las 100 Millas de Praga, el caraqueño estaba en el puesto 43.
El clima inclemente fue otro factor adicional con el cual se enfrentó. “Fue extremadamente fuerte. Desde la salida a las 9 de la noche y hasta las 5 de la madrugada no dejó de nevar. Corría con nieve más arriba del tobillo y el viento era de más de 60 kilómetros por hora, lo que hacía la sensación térmica de menos quince grados bajo cero aproximadamente”.
Elorza compitió este año en cuatro eventos internacional de ultramaratones. En Japón (UT del Monte Fuji), en Costa Rica (ultrarace), en Chile (Ultramaratón de Los Andes) y en las 100 millas de Praga.