Tan solo 17 días antes del comienzo del Mundial del fútbol 2014, el Maracaná, estadio que albergará siete partidos del torneo, entre ellos la final, se prepara para recibir las oleadas de visitantes.
Para el buen funcionamiento del gran coso del fútbol brasileño, 600 voluntarios trabajarán en los alrededores y en su interior ayudando a orientar a los aficionados que acudan a ver partidos y en especial a aquellos con necesidades especiales de movilidad, como discapacitados físicos, embarazadas y personas con niños pequeños, informaron hoy los responsables por el estadio en rueda de prensa.
Los simpatizantes de los diferentes equipos contarán con toda la información referente al acceso en la entrada en la que, además de los datos propios del partido, figura claramente la puerta por la que deben acceder, y la localización de su asiento.
En el dorso de los ingresos, también podrán observar los objetos con los que no podrán acceder al estadio.
En las inmediaciones del terreno de juego, algunos operarios finalizan las labores para acondicionar la sala de prensa y el área en la que está previsto que trabajen los profesionales del sector en el que será el mayor centro de medios de las doce ciudades sede.
También para garantizar la seguridad, los responsables por la misma fueron instruidos para atender las posibles situaciones de tensión que pueden producirse durante los encuentros.