Magallanes regresó a su puerto en busca de un baño balsámico que levantara los ánimos de sus tripulantes después de su fracaso por Puerto La Cruz, donde fueron barridos. Y frente a su gente reaccionaron y no fallaron, tras derrotar 5-4 a los Bravos de Margarita, para volver a la senda del triunfo.
Para así retornar a la vida e ir recuperando el terreno perdido, que por estos días los tiene en los últimos puestos de la tabla. Y desde el primer capítulo los bates navieros alzaron las velas de la nave, cuando el cubano Adonis García conectó un sencillo remolcador, para iniciar la fiesta naviera.
Pero esa celebración fue empañada en el inicio del segundo, por culpa de un viejo conocido. Eliézer Alfonzo llevó la paridad en Valencia gracias a un cuadrangular solitario, que significó para el “Matatán” llegar al liderato del departamento de máximos jonroneros de la LVBP. 125 batazos de vuelta completa colecciona el oriental, para ponerse la corona que tanto deseaba.
Y después de ese batazo histórico, los Bravos siguieron atacando al abridor Anthony Lerew, que toleró otra carrera, cuando Mario Martínez disparó un doble que llevó al home al Manuel Piña. Esas dos carreras fueron las únicas que aceptó el lanzador gringo, que toleró cinco imparables y ponchó a tres rivales.
Tras ese ataque margariteño, Magallanes salió a flote y en el cierre de esa entrada produjo tres carreras gracias a su poderío ofensivo, para romper el empate e irse arriba. Lerew apretó las tuercas después del apoyo ofensivo, silenciando a los bates insulares. Que montaron una amenaza en el mismo noveno inning, que puso a temblar a los presentes en el José Bernardo Pérez.
Primero fue David Peralta, que con un doble remolcó a un compañero, y después fue Carlos García con un sencillo productor. Pero Hassán Pena no se intimidó y terminó poniendo el candado al juego, para sellar el quinto triunfo filibustero.
Anthony Lerew se llevó su primer lauro de la campaña y Steve Hammond cargó con la derrota después de trabajar un inning completo, donde aceptó tres imparables y tres carreras.
