Puede que se haya inspirado en Zinedine Zidane, pero no en lo más recomendable: Olivier Giroud, figura francesa del Arsenal, no supo controlar los nervios en el tradicional 'Boxing Day' y fue expulsado por un cabezazo a un rival, lo que le costará una suspensión de tres partidos y le ha traído ya una lluvia de críticas.
"Lo que hizo Giroud es completamente estúpido. Supongo que no se puede ser guapo como un Dios y tener también cerebro", dijo en Twitter Gary Lineker, exestrella de la selección de Inglaterra reconvertido a presentador de televisión.
El Arsenal ganó 2-1 al Queens Park Rangers en la 18ª jornada inglesa, el viernes, pero lo hizo a pesar de Giroud, que además de dejar a su equipo en la segunda parte con diez hombres se perderá tres encuentros con los Gunners, la sanción automática que se recibe en la Premier League por una tarjeta roja directa.
No estará por lo tanto en dos desplazamientos difíciles, a los terrenos del West Ham el domingo en la 19ª jornada y luego a Southampton, el 1 de enero. Tampoco jugará en casa ante el Hull el domingo 4 de enero, en la Copa de Inglaterra.
Desde que regresó de su lesión a finales de noviembre tras tres meses de baja, Giroud estaba en un gran momento de forma, con cuatro tantos en sus seis partidos anteriores al del viernes.
Su entendimiento con el chileno Alexis Sánchez y Danny Welbeck mejoraba partido a partido y había aportado una gran dimensión física al juego de los londinenses.
Su suspensión es un contratiempo serio para el Arsenal, sexto (30 puntos, 5 menos que el tercero, el Manchester United), antes del partido del domingo ante un West Ham que querrá recuperarse de su derrota del viernes ante el Chelsea (2-0).
"Giroud cometió un gran error", reconoció el entrenador del Arsenal, Arsène Wenger.
"Merece su tarjeta roja. No se controló y nos dejó en una situación complicada cuando hasta entonces habíamos controlado tranquilamente el partido", explicó./