Cada día, cada año es una bendición.
Cada luz de día recibida.
Cada enseñanza de vida.
Cada experiencia llevada por la vida
es una bendición.
Cada amor entregado y recibido
es una bendición.
Cada error cometido y tropiezo en el camino
da oportunidad por cada día conseguido
el reparo y la esperanza de seguir viviendo.
Con eso te deseo que cumplas muchos años más lleno de bendición y felicidad y cuando cumpla los 99
nos invita para picarle la torta.
Son los mejores deseos del Lic. Jorge E. Gomez C. Señora e Hijos.