Después de la marginación por parte de Claudio Borghi de cinco jugadores por llegar tarde a la concentración de la selección chilena antes del partido frente a Uruguay, sólo se habían conocido las excusas de Arturo Vidal, Carlos Carmona y Gonzalo Jara, quienes a través de diversos mecanismos, se comunicaron con el cuerpo técnico. También se menciona que Jean Beausejour hizo gestiones para conseguir resolver el duro trance con el seleccionador y el plantel de la Roja.
Faltaba la versión de Jorge Valdivia, jugador de Palmeiras. El volante emitió una declaración pública, donde en lo medular sostiene que "Reconozco haber incurrido en una falta a la disciplina deportiva, al no haber llegado a la hora acordada a la concentración del equipo, y por ello estoy dispuesto a asumir las consecuencias de la misma, según se juzgue por los organismos pertinentes".
Sin embargo, el jugador en ningún momento exhibe arrepentimiento ni tampoco ofrece excusas a sus compañeros y cuerpo técnico. En la nota de prensa, Valdivia no menciona el consumo de alcohol, cuestión que fue reconocida por él y los demás futbolistas involucrados en el incidente un día después que fueron expulsados de la concentración.
Los antecedentes del caso fueron enviados por el directorio de la ANFP al Tribunal de Disciplina de la corporación.
