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lunes, 5 de diciembre de 2016

Futbol Colombiano: De la mano de Bava, el Atlético es semifinalista

Apostó al orgullo y al amor propio para sacar adelante un sueño que tenía truncado durante varios años y se encontró como un digno y gallardo semifinalista de la Liga Águila II de 2016.
En un estadio de Palmaseca que estaba a desbordar, el Atlético Bucaramanga de Flabio Torres silenció a los seguidores del Deportivo Cali con un gigantesco Jorge Bava y un efectivo Mauro Guevgeozián.
El estratega búcaro le dio la lectura indicada a un cotejo que tenía embolatado y en el segundo periodo le cambió la cara a sus dirigidos, para asegurar, con el empate 1-1 (global 3-2), el paso a las semifinales, donde se medirá contra Deportes Tolima.
Dominio ‘azucarero’
Deportivo Cali fue el amo y señor del primer periodo. El cuadro ‘azucarero’ se apoderó de la pelota y generó varias ocasiones de gol en la portería de un Atlético Bucaramanga que a pesar de sumar muchos hombres en el sector defensivo, no logró frenar la ofensiva del rival.
Los ‘azucareros’, como era de esperarse, salieron a presionar al adversario, recuperaron la pelota en zona alta y manejaron el esférico por todos los sectores de la cancha, gracias a la habilidad de hombres como Mayer Candelo, Fabián Sambueza y José Lloreda.
Los ‘leopardos’, entre tanto, apostaron por un planteamiento muy defensivo, pues se replegaron en su terreno y no consiguieron apoderarse de la pelota.
La línea de cinco defensores sufrió más de la cuenta, tanto por las bandas, como a la espalda de los centrales y, por si fuera poco, los mediocampistas de marca no lograron frenar la elaboración del adversario.
Fue tal el dominio de los vallecaucanos, que el arquero Jorge Bava se trasformó en figura al atajar varios balones de gol ante los atacantes ‘verdes’.
El premio a la ambición del Cali llegó en el minuto 27, luego de un cabezazo de Aquivaldo Mosquera, quien aprovechó el lanzamiento de esquina de Candelo y la pasividad de la zaga búcara.
El aporte uruguayo
Para la segunda parte, el ‘Leopardo’ salió de la cueva y fue a buscar el botín. El partido se hizo de ida y vuelta, con dos elencos que buscaron, sin mucho tránsito en el medio del campo, las porterías.
Las oportunidades de gol llegaron mediante los atacantes ‘amarillos’ Mauro Guevgeozián y Darío Rodríguez; quienes se vieron mejor rodeados con los ingresos de John Pérez y Maicol Balanta y el aporte de Daniel Cataño.
El Atlético regresó a la línea de cuatro en defensa y ganó en volumen de ataque.
Mientras tanto, Cali se encontró con un gigantesco portero uruguayo Jorge Bava, quien como en el primer tiempo atajó de todo.
Sobre el minuto 75, el balón cayó en el área ‘azucarera’, Diego Peralta lo peinó y el ‘charrúa’ Mauro Guevgeozián, en una acción acrobática que quedará grabada en la memoria de la afición ‘amarilla’, la envió a la red para dejar al club más tradicional de la región en las semifinales de la Liga Águila y con el legítimo derecho a soñar con la primera estrella.
¿Porqué clasificó bucaramanga?
Porque el entrenador Flabio Torres replanteó el partido en el segundo tiempo y el equipo fue más ofensivo.

Porque el cancerbero Jorge Bava fue la gran figura, al atajar muchos balones de gol.

Porque Deportivo Cali no logró capitalizar las posibilidades de gol que generó.

Porque una vez más el juego aéreo le permitió desequilibrar el partido.

Porque cuando no encontró el juego, apeló a la actitud. 
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